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Oficina del Secretario de Prensa
31 de agosto de 2008
Declaraciones del Presidente Tras Sesión Informativa en FEMA
Centro de Operaciones de la FEMA
Washington, D.C.
12:24 P.M. EDT
EL PRESIDENTE: Estoy aquí en la oficina principal de la FEMA, donde acabo de recibir las noticias más recientes y también he venido a agradecerles a las personas detrás de mí por trabajar tanto para asegurarse de que estemos preparados para el huracán Gustav. Se ha hecho muchísimo en preparación para la tormenta. En toda la costa del Golfo, gobernadores y funcionarios estatales y líderes locales se están tomando esto muy en serio y preparándose con medidas enérgicas.
El secretario Chertoff y el administrator Paulison de la FEMA me informan que el gobierno federal ha enviado con anticipación, a toda la región, equipos de administradores especializados en situaciones de emergencia, médicos, ambulancias, equipos de búsqueda y rescate, aeronaves, y productos básicos. Hay millones de raciones y millones de litros de agua listos de antemano, como también muchas mantas y catres. En otras palabras, se han hecho muchos preparativos en anticipación a esta tormenta.
Estamos trabajando con los gobernadores para identificar y obtener albergue para las personas en la trayectoria de la tormenta. Varios estados, entre ellos Missouri, Texas y Nuevo México, se están preparando para recibir, y ya han recibido, a muchos evacuados. La gente está saliendo de las zonas que nos preocupan, y nos estamos esforzando mucho para asegurarnos de que tengan adónde ir.
El Cuerpo de Ingenieros del Ejército me informa que aunque los diques están más fortificados que nunca, la gente a lo largo de la costa del Golfo, particularmente en Nueva Orleáns, debe comprender que con una tormenta de estas dimensiones, existe un gran riesgo de inundaciones significativas.
El mensaje a los residentes de la costa del Golfo es: Esta tormenta es peligrosa. Existe una posibilidad real de inundaciones, oleadas y vientos fuertes. Por lo tanto, es muy importante que sigan las instrucciones y las pautas de los funcionarios estatales y locales. No se arriesguen ni hagan que los socorristas se arriesguen innecesariamente. Y sepan que el pueblo estadounidense los respalda. Enfrentaremos juntos esta emergencia.
En los próximos días, aliento a todo el país a que ayude a sus vecinos necesitados. Pueden contribuir a entidades benéficas, como la Cruz Roja. Pueden ofrecerse como voluntarios para ayudar a los necesitados. Y, por supuesto, pueden orar por quienes posiblemente estén sufriendo.
En vista de estos sucesos, no iré a Minnesota para la Convención Nacional Republicana. Voy a viajar a Texas mañana para visitar el Centro de Operaciones de Emergencia en Austin, donde se realiza la coordinación entre funcionarios federales, estatales y locales. Tengo la intención de ir a San Antonio, donde funcionarios estatales y locales están preparando materiales de socorro para Texas y Luisiana, y tendré la oportunidad de conversar con residentes de ambos estados que hayan sido evacuados.
No viajaré a Luisiana mañana porque no quiero que mi visita dificulte de manera alguna la respuesta de nuestro personal de emergencia. He estado hablando con los gobernadores ayer y hoy; también hablé con el alcalde Nagin de Nueva Orleáns para asegurarme de que estén recibiendo todo lo que necesitan del gobierno federal a fin de prepararse para lo que prevén será una situación difícil. Espero poder ir a Luisiana tan pronto como las condiciones lo permitan.
Esta nación ha llegado a conocer el espíritu fuerte y tenaz de los pobladores de la costa del Golfo. Han salido adelante a pesar de grandes desafíos en el pasado, y también saldrán adelante a pesar de éste. Mientras tanto, Laura, yo y toda la nación recordamos y oramos por todos los que se preparan para esta tormenta.
Muchísimas gracias.
END 12:28 P.M. EDT