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Office of the Press Secretary
19 de julio de 2003
DISCURSO RADIAL DEL PRESIDENTE A LA NACIÓN
Buenos Días.
La semana entrante, el Tesoro de los Estados Unidos comenzará a imprimir y enviar por correo más de 25 millones de cheques de crédito tributario por hijo menor, devolviendo así 12 mil millones de dólares a manos de familias estadounidenses. Estos reembolsos son el resultado de la Ley de Empleos y Crecimiento Económico que recientemente firmé, la cual aumenta el crédito tributario por hijo de $600 a $1000 por hijo. Y en vista de que esta nueva ley redujo las tasas impositivas, a principios de este mes los negocios redujeron la retención de impuestos de los cheques de pago de sus empleados. Ahora, estos trabajadores y sus familias tienen una carga tributaria menor, y más ingresos después de impuestos.
Con los reembolsos por concepto del crédito tributario por hijo y con la entrada en vigor de tasas impositivas más bajas, las familias en Estados Unidos dispondrán de más de su propio dinero para hacer compras, pagar sus cuentas, ahorrar para la educación de sus hijos, e invertir en una nueva casa o un nuevo negocio. Hay señales prometedoras de que nuestras acciones están contribuyendo al crecimiento económico. Los inversionistas individuales están mostrando mayor confianza, lo que está conduciendo a un aumento importante en el mercado de valores. Y gracias a nuestros esfuerzos por reducir los impuestos sobre dividendos por acciones, docenas de compañías principales han anunciado planes para aumentar sus pagos existentes de dividendos, o pagar dividendos por primera vez - colocando así miles de millones de dólares en efectivo a disposición de accionistas.
A principios de esta semana, me reuní con importantes economistas privados, quienes ven una tasa más rápida de crecimiento económico en los próximos dieciocho meses. El mercado de vivienda en Estados Unidos está robusto, fortalecido por bajas tasas de interés hipotecario y aumentos en los ingresos después de impuestos. La inflación está baja, las ventas al por menor han estado aumentando, y el crecimiento de la productividad - el indicador más importante de fuerza económica - se mantiene elevado.
Mi Administración continúa enfocada en un mayor ritmo de crecimiento económico que se traducirá en más empleos. Ahora que los estadounidenses pueden quedarse con más de lo que ganan, esperamos ver una demanda creciente para bienes y servicios. Y a medida que la demanda aumente, las compañías tendrán necesidad de más trabajadores para satisfacerla.
Continuaremos tomando acción sobre una amplia agenda para mayor crecimiento y más empleos. Estamos instando al Senado que se una a la Cámara de Representantes para aprobar una ley de energía que asegure un suministro estable y económico de energía.lo estamos instando por una reforma en lo que se refiere a litigios, de modo que los pequeños empresarios y manufactureros puedan concentrarse en crear empleos en lugar de luchar contra demandas frívolas. Estoy pidiendo a ambas Cámaras del Congreso que establezcan cuentas de re-empleo para quienes estén buscando empleo, de modo que puedan costear capacitación para trabajo, cuidado de niños, y otros costos relacionados a la búsqueda de empleo.
Un crecimiento económico más rápido traerá el beneficio adicional de mayores ingresos para nuestro gobierno. Y esos nuevos ingresos, junto con la disciplina en los gastos en Washington, DC, son la manera más segura de reducir el déficit. Mi presupuesto para el año fiscal 2004 contiene un modesto aumento en gastos discrecionales de sólo un 4 por ciento - más o menos el mismo aumento que en el presupuesto promedio de un hogar en Estados Unidos. Pido al Congreso que haga de la disciplina en los gastos una prioridad, a fin de que podamos cortar el déficit por la mitad durante los próximos cinco años.
El Gobierno no crea la prosperidad. Sin embargo, el Gobierno puede crear las condiciones que hacen posible la prosperidad. La Ley de Empleos y Crecimiento Económico de 2003 se basó en una fe fundamental en la energía y la creatividad del pueblo estadounidense. Con trabajo duro y determinación diaria, los empresarios y los trabajadores están moviendo esta economía hacia delante. La economía estadounidense va por buen camino, y podemos estar confiados de que hay mejores días por venir.
Gracias.
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