The White House
President George W. Bush
Print this document

For Immediate Release
Office of the Press Secretary
4 de marzo de 2003

Presidente Anuncia Marco para Modernizar y Mejorar Medicare

10:00 A.M. EST

EL PRESIDENTE: Gracias por esa cálida bienvenida. Aprecio la invitación. Es un honor para mí estar con tantos de los excelentes médicos de nuestra nación y sus seres queridos.

Han venido a nuestra capital en un momento en que este gobierno enfrenta muchos asuntos críticos. Están acá en tiempos históricos. Tenemos muchas responsabilidades aquí en Washington. Tenemos la responsabilidad de defender al pueblo estadounidense de las amenazas de una nueva era. Tenemos la responsabilidad de ganar la primera guerra del siglo XXI. Y estamos esforzándonos mucho para ganar esta guerra.

Durante el fin de semana, las autoridades estadounidenses y paquistaníes le dieron un golpe dura a al-Qaida al arrestar a Khalid Sheik Mohammed, el planificador principal de operaciones, el asesino principal de la red al- Qaida. El hombre que organizó los ataques del 11 de septiembre ya no es un problema para los Estados Unidos de Norteamérica. (Aplausos.)

Es un tipo de guerra diferente al que estamos acostumbrados en los Estados Unidos. Es una guerra que requiere de paciencia y concentración. Es una guerra en la cual perseguiremos y atraparemos a aquellos que odian a los Estados Unidos, una persona a la vez. Los terroristas están enterándose que no hay un lugar seguro para ellos en este mundo. Están descubriendo que la justicia puede llegar de maneras diferentes, a cualquier hora del día o de la noche. Están descubriendo el significado de la determinación estadounidense, nuestro deseo profundo de defender nuestra libertad y mantener la paz.

Es importante para nuestros conciudadanos que reconozcan que la vida cambió el 11 de septiembre de 2001. Obviamente, cambió de una manera trágica para aquellos que perdieron a seres queridos como resultado de los crueles ataques contra nuestro pueblo. Pero aprendimos una dura lección, que es que los océanos ya no nos protegen de aquellos que odian a los estadounidenses y lo que representan. Y por lo tanto, es importante para los Estados Unidos tomar seriamente cada amenaza que se desarrolle en el extranjero, que ya no podemos escoger si una amenaza requiere que nos involucremos. Si vemos amenazas que se desarrollan que pueden hacerle daño al pueblo estadounidense, debemos lidiar con ellas.

Estamos lidiando con Iraq porque el dictador de Iraq tiene armas de destrucción en masa; ha utilizado armas de destrucción en masa contra su propia gente. No tolera a los Estados Unidos, no tolera a nuestros amigos, no tolera a nuestros aliados. Tiene conexiones con redes terroristas. La primera guerra del siglo XXI requiere que Estados Unidos trabaje con los organismos internacionales para lidiar con estas amenazas, y continuaremos haciéndolo.

Acudí a las ONU a recordarle que ese organismo tiene una responsabilidad de asegurarse de que sus palabras tengan peso. Le recordé que durante 12 largos años las Naciones Unidas le ha pedido a Saddam que se desarme porque es peligroso. Fuimos y conseguimos otra resolución hace casi cuatro meses, aprobada unánimemente por el Consejo de Seguridad, la cual decía claramente, Saddam, debe deponer las armas.

Esa es una decisión que Saddam Hussein debe tomar. Es su opción determinar si hay guerra o paz. Es su opción decidir si escuchar las exigencias de un mundo libre. Pero cualquiera que sea su decisión, por el bien de la paz, por el bien de la libertad, por el bien de la seguridad de nuestro pueblo, Saddam Hussein será desarmado. (Aplausos.)

Tenemos la responsabilidad de crear puestos de trabajo y darle más impulso a nuestra economía. La función de gobierno no es crear riqueza, sino un entorno en el cual el espíritu empresarial de los Estados Unidos puede prosperar. Es por eso que le estoy pidiendo al Congreso que acelere la desgravación fiscal que ya aprobó, que acaben con la doble imposición de los dividendos, que fomenten la inversión. Mientras más dinero tenga la gente en sus bolsillos, mayores las probabilidades de que exijan un producto o un servicio. Y cuando exijan un producto o un servicio alguien en el mercado proporcionará ese producto o servicio. Y cuando lo hagan, alguien en los Estados Unidos tendrá mayores probabilidades de encontrar trabajo. (Aplausos.)

Y hoy he venido a hablar acerca de otra responsabilidad, que es mejorar la atención de la salud en los Estados Unidos. (Aplausos.) Nuestra visión, nuestro objetivo es un sistema en que todos los estadounidenses tienen una buena póliza de seguro, en que todos los estadounidenses pueden escoger su propio médico, en que los ancianos y los ciudadanos de bajos ingresos pueden recibir la ayuda que necesitan, en que... el sistema es uno en que la relación entre el paciente y el médico es el centro de la buena atención médica. (Aplausos.)

La visión contrasta drásticamente con las ideas de atención médica dirigida por el gobierno, las ideas en que el gobierno federal decide las cuestiones de atención, el federal gobierno raciona la atención, el federal gobierno dicta la protección; una visión que, en mi opinión, cohibirá la innovación, cohibirá la calidad y aumentará los costos para los pacientes en los Estados Unidos.

Tenemos mucho trabajo por hacer respecto a este importante asunto. Pero considero que se puede cumplir con la tarea. Es por eso que he promovido este plan de trabajo. El Presidente de la Cámara de Representantes, Denny Hastert, está comprometido a dedicarse a lograr reformas positivas. En el Senado de los Estados Unidos, hay un Líder Mayoritario nuevo. Sabe un par de cosas respecto a los médicos y los pacientes y su relación. (Aplausos.)

Estoy aquí para pedir su ayuda e informarles que vamos a aprovechar el momento y trabajar con personas de ambos partidos para lograr una reforma significativa que cumpla con la visión que hará la atención médica positiva y optimista y esperanzadora para todos nuestros ciudadanos. (Aplausos.)

Y, entonces, deseo agradecerles por permitirme venir. (Aplausos.) Le agradezco a Yank Coble. Me dijeron que un hombre de Jacksonville, Florida llamado Yank iba a presentarme. (Risas.) Le pregunté, ¿por qué Yank? Me dijo que no tenía suficiente tiempo para explicarlo. (Risas.)

Es un honor para mí que Tommy Thompson esté aquí. Tommy está realizando una excelente labor. (Aplausos.) Hoy nos acompaña un miembro del Congreso del estado de Pennsylvania, el Congresista Jim Greenwood. Es un honor para m que esté aquí, Jim. Aprecio su tenaz determinación en aprobar la reforma de la responsabilidad médica. (Aplausos.)

Quiero darles las gracias a Mike Maves y Ed Hill, a todos los miembros de la Junta de Fideicomisarios de la American Medical Association, y gracias a todos por asistir.

Los estadounidenses están orgullosos de sus médicos y orgullosos de sus enfermeros, orgullos de los profesionales de la medicina en el país. Nuestra nación cuenta con los mejores profesionales médicos del mundo. Son más que miembros de una profesión; están respondiendo a un gran llamado. Muestran interés en sus pacientes por medio de años de capacitación y vidas enteras de compromiso al bienestar de otros. Aprecio la labor que realizan. Y deseo dales las gracias por su aptitud, su talento y su compasión.

Estados Unidos cuenta con el mejor sistema de atención de la salud del mundo. Tenemos facultades de medicina sobresalientes, hospitales maravillosos, investigadores brillantes. Nos encontramos en la vanguardia de las nuevas tecnologías. Estamos a punto de encontrar las curas de algunas de las enfermedades más temidas por la humanidad. Estoy optimista respecto a nuestro futuro. Es por ello que colaboré con el Congreso para asegurarnos de que el National Institutes of Health recibiese una cantidad récord de fondos, para que pudiésemos estar en la vanguardia de los cambios; para que pudiésemos afrontar los problemas que hace unos años parecían insuperables; para que la gente pueda vivir vidas mejores. Sin embargo, en medio del optimismo, es importante que reconozcamos que tenemos serios desafíos en la atención de la salud, y que debemos confrontarlos ahora, y no esperar.

Demasiados de nuestros ciudadanos no reciben atención médica. Propongo créditos tributarios reembolsables para ayudar a las personas de bajos ingresos a comprar su propio seguro médico. (Aplausos.) Demasiados de nuestros ciudadanos usan las costosas salas de emergencia como su fuente principal de atención de la salud porque no tienen otras opciones. Necesitamos asegurarnos de que las personas tengan atención preventiva y tratamiento antes de la sala de emergencias... antes de que vayan a la sala de emergencia. Y es por eso que propuse y el Congreso aprobó más fondos para la comunidad y los centros de salud para los emigrantes en todo el país. (Aplausos.)

El costo de atención de la salud está aumentando más rápidamente que en más de una década. Existen razones por las cuales los costos aumentan. La investigación es cara. Las nuevas tecnologías son caras... y valen la pena. Cuando uno salva vidas con la tecnología, vale la pena. Pero otros costos en aumento son innecesarios. Y el problema no comienza con la sala de espera o en el quirófano, comienza en la sala de tribunal. (Aplausos.) Tenemos un problema en los Estados Unidos. Hay demasiadas demandas frívolas contra nuestros médicos y los pacientes están pagando el precio. (Aplausos.)

Hasta las demandas más frívolas pueden ser caras. Un médico y su compañía de seguros deben gastar dinero para litigar la demanda frívola o, en muchos casos, llegar a un acuerdo para librarse de ella. De cualquier manera, las primas suben de precio. De cualquier manera, el paciente paga. Cuando las primas de responsabilidad suben mucho, algunos médicos dejan de ver pacientes.

Si uno de los objetivos de un buen sistema de atención médica es que sea económico y accesible, y si las demandas están elevando el costo de la medicina o haciendo que los médicos dejen de ejercer porque es demasiado costoso, tenemos que hacer algo al respecto. Tenemos que asegurarnos de que los casos de los cuales escuchamos sean remediados con leyes buenas.

Estuve en Scranton, Pennsylvania, y conocí a Debra DeAngelo, una gran dama. Cuenta con una gran trayectoria de seguridad en su clínica de manejo del dolor. Le encantaba vivir en Scranton porque fue allí donde se crió. Quería aplicar su talento a las personas con quienes se crió. Su seguro contra las responsabilidades era tan caro que no pudo ejercer la medicina más en Scranton, Pennsylvania y cerró su clínica, la cual empleaba a 10 y atendía a 2,000 pacientes.

Al describir su caso, estaba con el corazón destrozado de no poder ejercer la medicina donde desea ejercer. Estaba con el corazón destrozado por s misma; estaba con el corazón destrozado por los pacientes en quienes se preocupaba mucho e interesaba mucho. Ella y su familia se mudaron a Hershey, donde está trabajando para un hospital que está cubriendo sus necesidades de seguro. Scranton, Pennsylvania perdió una excelente persona porque el seguro contra las responsabilidades hizo que tuviera que irse de la ciudad. Ningún médico bueno debería verse forzado a irse de una comunidad que conoce y a la cual atiende simplemente debido al costo del seguro. (Aplausos.)

Muchos médicos atienden a los seres humanos de las maneras más compasivas. Fui a Mississippi, conocí a un hombre que se había mudado a Mississippi para proporcionar atención médica a nuestros... a nuestros ciudadanos más necesitados; atención médica en la región del delta del Mississippi, una región del país que necesitaba médicos... la gente necesita ayuda.

Y me contó qué tal era tratar de ejercer la medicina de manera compasiva. Había oído un llamado y fue a prestarles servicios a otros seres humanos. Pero el seguro contra las responsabilidades hizo que este buen samaritano se fuera del estado. Creo que ahora está ejerciendo la medicina en Dakota del Norte o Minnesota. Hay cierta gente que sufre que tiene la suerte de tener a este buen médico entre ellos.

Hay un caso de una señora - y esto pasa todo el tiempo -- en Nevada que se llama Ruth Valentine. Está embarazada. Llamó a más de 50 médicos locales y no pudo encontrar a nadie en Nevada que la atendiera, por lo que fue a Utah, donde se está quedando donde amigos hasta que tenga a su bebé. Ninguna familia en los Estados Unidos debería enfrentar este tipo de tensión o preocuparse durante uno de los momentos más vulnerables de la vida.

Estos son apenas unos cuantos casos, los cuales son verdaderos y reales, todos los cuales suceden en todo nuestro país. Veinte por ciento de los hospitales en los Estados Unidos han tenido que dejar de ofrecer ciertos servicios - asistir en los partos de los bebés o neurocirugía o cirugía ortopédica - debido a un puñado de abogados que han escogido estos procedimientos para las demandas frívolas.

Al mismo tiempo, los médicos en los hospitales están usando ciertas pruebas y tratamientos demasiado como medidas defensivas para evitar la litigación. Una encuesta reciente de médicos mostró el alcance de la medicina defensiva en los Estados Unidos. Ocho de cada diez médicos dicen que han pedido más pruebas de las que necesitan. Tres de cada cuatro remiten a los pacientes a especialistas más a menudo de lo que consideran médicamente necesario. Cuatro de cada diez receta antibióticos más a menudo de lo que consideran necesario. Toda esta medicina defensiva está aumentando los costos para los pacientes, los estados y el gobierno federal.

El costo directo del seguro contra las responsabilidades y el costo indirecto de la medicina defensiva elevan los costos de atención médica del gobierno federal en más de $28,000 millones al año. Cuando el gobierno federal es azotado por costos médicos más altos, los contribuyentes pagan la cuenta. Este es un problema nacional, algo que afecta nuestro presupuesto tan significativamente que requiere de una solución nacional. (Aplausos.)

Queremos que nuestro sistema legal funcione para nuestros pacientes. Queremos que la gente tenga una oportunidad de presentar su caso. Cualquiera que sea dañado en las manos de un médico debería tener una audiencia. Eso es lo que deseamos para el sistema judicial. Debería poder recuperar el costo total de su atención y otras pérdidas económicas. Si son dañados por un médico, deberían poder recuperar los costos económicos, los costos económicos. Deberían poder recuperar también los daños no económicos. Pero por el bien del sistema, se debería limitar los daños no económicos a $250,000. (Aplausos.)

Si se hace daño por conducta indebida seria, los pacientes deberían también poder tratar de obtener daños punitivos razonables. Sin límites justos y razonables, el sistema legal luce más y más como una lotería. Y ya que los abogados litigantes reciben hasta el 40 por ciento de las adjudicaciones y acuerdos, está muy claro quién tiene el boleto ganador de la lotería. (Aplausos.) Las cortes estadounidenses no deberían estar sirviendo los intereses de los abogados de daños corporales; deberían estar sirviendo la causa de la justicia y las necesidades de los pacientes estadounidenses. (Aplausos.)

El año pasado, gracias a Jim Greenwood y a otros miembros del Congreso, la Cámara de Representantes aprobó buenas reformas a la responsabilidad médica. Pero el Senado dejó de tomar medidas. Desde entonces, el problema sólo ha empeorado. Necesitamos aprobar la reforma de la responsabilidad médica en ambas cámaras. Necesitan comunicarse con sus Senadores. No importa en qué partido político estén; necesita comunicarse con ellos. Necesitan explicar el problema en términos claros. Quiero promulgar una buena reforma de la responsabilidad médica este año. (Aplausos.)

Nuestro sistema legal también debe abordar los errores médicos. Una de las mejores maneras de atender a los pacientes es evitar los errores y prevenir las complicaciones antes de que se conviertan en daños. Los médicos y los hospitales buscan constantemente maneras de mejorar la seguridad de los pacientes.

La seguridad de los pacientes mejora cuando los médicos y enfermeros intercambian información acerca de los problemas y las soluciones. Sin embargo, en la sociedad litigiosa en la que vivimos, muchos médicos temen hablar sobre estos esfuerzos francamente, porque temen que se les entable una demanda. Los médicos no quieren poner nada por escrito para mejorar la calidad de la atención de la salud porque es posible que se entregue a un abogado que anda pescando en busca de una demanda. (Aplausos.) Voy a pedirle al Congreso que apruebe una ley para asegurarnos de que la información que se genere para la seguridad y la atención de los pacientes no sea utilizada por los abogados contra los médicos y hospitales. (Aplausos.)

La seguridad de los pacientes también mejora cuando los médicos pueden tener acceso a los historiales médicos sin retraso. Cuando un paciente tenga una emergencia médica lejos de casa, el médico que lo atienda debería tener acceso rápido a los historiales médicos de esa persona. Sin embargo, la industria de la atención de la salud, aunque mejora en muchos asuntos, se ha quedado atrás en la informática.

Ahora mismo, como bien saben ustedes más que la mayoría, los historiales médicos se mantienen en formatos diferentes - aunque no lo crean, muchas veces en papel. (Risas.) En archivos. (Risas.) Se pueden perder. (Risas.) En el presupuesto para el próximo año propuse usar la informática para mantener expedientes mejores, para compartir información con los médicos de manera que puedan continuar mejorando la seguridad de los pacientes. (Aplausos.)

Tommy Thompson y su departamento están sentando el ejemplo y están aprovechando la informática. Por ejemplo, están utilizando la informática para una guía comparativa de Internet para las clínicas de reposo. Es un buen uso del Internet. Es una buena manera de dirigirse directamente a los consumidores de los Estados Unidos. Las familias ahora pueden comparar las clínicas de reposo unas con las otras. Tiene sentido. No hay nada como mejorar la calidad al hacer que la gente sea responsable. Son capaces de comparar con medidas tales como índices de infección o cómo progresan los pacientes en pararse. Es una manera práctica de usar la informática.

Y eso es importante, particularmente para las clínicas de reposo, porque nuestra nación ha aceptado una responsabilidad especial por el bien de la salud de los ciudadanos ancianos, de asegurarnos de que los años de la jubilación no sean años de penuria, penuria innecesaria. Nuestro sistema de Medicare es un compromiso vinculante de una sociedad compasiva. Debemos renovar ese compromiso al proporcionarles a los ancianos de la actualidad y del futuro atención preventiva y los medicamentos nuevos que están transformando la atención médica en nuestro país.

Cuando el Presidente Lyndon Johnson promulgó Medicare hace 38 años, prometió un sistema que llevaría los milagros de curación de la medicina moderna a los ciudadanos ancianos. En 1965, la medicina moderna casi siempre significaba la atención por un médico dentro de un hospital. Ahora, la medicina moderna ofrece mucho más: tratamientos con medicamentos, dispositivos médicos nuevos, pruebas de enfermedades y la atención preventiva. Todos los ancianos y ciudadanos discapacitados de Medicare deberían tener acceso a estas ventajas. (Aplausos.) No lo tienen.

Comparado a la gente en los planes privados de salud, los pacientes de Medicare tienen opciones limitadas. Medicare paga para que un médico realice una operación de bypass del corazón, pero no paga los medicamentos que podrían prevenir la necesidad de la cirugía. Medicare paga una amputación, pero no la insulina que podría ayudar a los pacientes con diabetes a evitar la pérdida de sus extremidades. Medicare paga la quimioterapia y la cirugía debido al cáncer, pero después de que los aseguradores privados hicieron una prestación anual de las mamografías anuales, tomó diez años para que Medicare hiciera lo mismo y luego solamente porque el Congreso de los Estados Unidos Congreso aprobó una ley. Los ancianos no deberían tener que esperar una ley del Congreso para recibir atención efectiva y moderna. (Aplausos.)

Medicare no protege a nuestros ancianos de las cuentas abrumadoras de los hospitales. Si uno tiene que ir a un hospital, Medicare le compra un deducible de $840. Después de dos meses, se le cobra $210 al día. Después de tres meses, Medicare cobra $420 al día. Después de cinco meses, Medicare hace que uno pague toda la cuenta.

En comparición, el plan estándar para los miembros del Congreso de los Estados Unidos y otros empleados federales cobra un co-pago de $100 cuando uno ingresa al hospital y ni un solo dólar más, sin importar cuánto tiempo tenga uno que quedarse. Se supone que Medicare proteja los ahorros de nuestros ancianos. En muchos casos, no lo hace. Recientemente fui a Grand Rapids, Michigan, y conocí a Pat Wahl. Padecía de... padece de artritis reumatoide. Eso requiere de medicina cara. Perdió a su esposo en el año 2000. Perdió su protección médica. Tenía que depender totalmente de Medicare. Pronto, sus cuentas médicas comenzaron a superar sus ingresos y se vio forzada a vender su casa.

Este es un caso increíblemente triste, cuando uno se pone a pensar; ciertamente fue triste escuchar a Pat en Grand Rapids. Son casos innecesarios. Podemos y debemos mejorar Medicare y proteger a nuestros ancianos de los costos incontrolados de la atención médica. (Aplausos.)

La reforma de Medicare es una gran y complicada tarea. La gente tiene opiniones fuertes sobre este tema. (Risas.) Y necesitaremos extensa cooperación para lograr adelantos. Estamos colaborando estrechamente - digo nosotros - mi administración y Tommy y los miembros de mi equipo y los miembros de su equipo están colaborando estrechamente con los buenos y seriamente dispuestos líderes de ambas cámaras, líderes como los Senadores Frist y Grassley y Breaux, el Presidente Hastert y los Congresistas Thomas y Tauzin. Compartimos un compromiso básico a hacer algo al respecto. Compartimos un compromiso a estos objetivos de reforma.

Un sistema moderno de Medicare debe ofrecerles más opciones y mejores prestaciones a cada uno de los ancianos... a todos los ancianos. (Aplausos.) Todos los ancianos deberían contar con ayuda al comprar medicamentos recetados. (Aplausos.) Aquellos que menos los pueden costear deberían recibir ayuda adicional. Se debería proteger a los ancianos de los aumentos fuera de control de las primas. (Aplausos.) Y todos los ancianos deberían poder escoger el plan de atención de la salud que más se adecue a sus necesidades sin verse forzados a unirse a un HMO. (Aplausos.)

El elemento de decisión es esencial. Cuando una burocracia está encargada de conceder prestaciones, las prestaciones nuevas generalmente vienen de manera lenta y de mala gana, si acaso. Cuando los proveedores de seguro compiten por hacer negocios con un paciente, ofrecen nuevos tratamientos y servicios rápidamente. Si no lo hacen, el paciente - el consumidor - buscará servicios mejores en otra parte. Porque es en el interés de los proveedores tener clientes saludables, los pacientes recibirán la calidad de atención que necesitan.

El marco de reformas a Medicare que estoy divulgando hoy les daría a los ancianos la libertad de seleccionar una de tres oportunidades extensas. Primero, los ancianos que están contentos con el sistema actual de Medicare deberían poder permanecer en el sistema y recibir ayuda con los medicamentos recetados. (Aplausos.) Para reformar el sistema actual, propongo que emitamos una tarjeta de descuento que reducirá el costo de los medicamentos recetados por cada anciano en un 10 a 25 por ciento. Proporcionaremos un subsidio anual de $600 a los ancianos de bajos ingresos para que paguen los medicamentos recetados. Y estableceremos límites anuales en la cantidad que los ancianos tendrán que pagar ellos mismos en medicamentos sin una prima adicional. (Aplausos.)

Segundo, los ancianos que deseen más protección podrán escoger un tipo mejorado de Medicare. Esta opción incluirá protección total para la atención preventiva, una prestación integral para medicamentos recetados, protección contra los costos propios altos y ayuda adicional a los ancianos de bajos ingresos para que puedan recibir la prestación de medicamentos. Los ancianos podrán escoger sus especialistas, sus hospitales y sus médicos de cabecera.

El arreglo de honorarios por servicio ofrecería a los ancianos tipos similares de opciones de las que ahora disfrutan los miembros del Congreso, a quienes se les da muchas opciones entre planes de seguro médico que compiten. Lo que es bueno para los funcionarios públicos, incluso los miembros de la Cámara de Representantes y el Senado, es bueno para los ancianos de los Estados Unidos. (Aplausos.)

Tercero, los ancianos que deseen el tipo de prestaciones a la disposición de los planes de atención administrada, incluso la protección para medicamentos recetados, tendrán también esa opción. Esta opción pondría a los ancianos en una red económica de médicos, otorgaría protección para medicamentos y permitiría que los ancianos mantuviesen a un mínimo sus gastos propios.

Pasar a este sistema tomará tiempo. Y al hacer estos cambios, todos los ancianos estadounidenses recibirán una tarjeta de descuento de medicamentos recetados que podrán utilizar inmediatamente. Y los ancianos de bajos ingresos reunirán los requisitos inmediatamente para la prestación de medicamentos de $600 de Medicare. (Aplausos.)

Los líderes de ambos partidos políticos han hablado durante años acerca de este tema, acerca de añadirle prestaciones para los medicamentos recetas a Medicare. Y es hora de tomar medidas. El presupuesto que he presentado dedicará $400,000 millones adicionales a lo que ya hemos comprometido durante la próxima década para implementar esta visión de un sistema de Medicare más sólido. Estamos comprometidos a la reforma; estamos comprometidos a financiar las reformas. (Aplausos.)

Tenemos una responsabilidad - los médicos, aquellos de nosotros con cargos públicos, los ancianos de los Estados Unidos - de colaborar para asegurarnos de que Medicare cumpla con su promesa con esta generación y las generaciones del futuro. (Aplausos.)

Nuestro sistema de Medicare depende de la destreza y la dedicación de los médicos. Ustedes lo saben. Y esa dedicación debería ser compensada justamente. Como mencionó Yank, colaboramos con el Congreso para proteger a los médicos de los grandes recortes a los desembolsos de Medicare. A partir de este sábado, en vez de una reducción de 4.4 por ciento en los pagos de Medicare, los médicos recibirán un aumento de 1.6 por ciento. (Aplausos.) Este aumento es una señal de confianza en nuestros médicos. Y espero que todos ustedes muestren su confianza en Medicare al permanecer en el sistema. Medicare los necesita. Nuestros ancianos los necesitan.

Trátese de reformar Medicare, mejorar la seguridad de los pacientes o corregir los abusos en el sistema legal, los riesgos son altos. Debemos asegurarnos de que las opciones de los pacientes y el criterio de los médicos estén en el centro de la atención médica estadounidense. Debemos preservar la gran innovación y calidad de la medicina privada. Debemos cumplir con nuestros compromisos a los ancianos y ayudar a llevar el milagro de curación de la medicina moderna a las personas que lo necesitan en nuestra era.

Todos ustedes, como miembros de la profesión de la medicina, ejercen el poder de sanar y mantienen una gran confianza. Cuentan con mi respeto. Y en días futuros, espero con interés trabajar con ustedes en estas reformas necesarias. Que Dios bendiga su trabajo. Y que Dios continúe bendiciendo a los Estados Unidos. (Aplausos.)

END 10:36 A.M. EST


Return to this article at:
/news/releases/2003/03/text/20030304-5.es.html

Print this document