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Oficina del Secretario de Prensa
13 de enero de 2009

Declaraciones del Presidente
Salón Este

1:07 P.M. EST

EL PRESIDENTE: Buenas tardes a todos y gracias por venir. Hemos congregado a un distinguido grupo para rendirle homenaje a tres buenos amigos: el Presidente Uribe, el Primer Ministro Howard y el Primer Ministro Blair. Laura y yo les damos la bienvenida a la Casa Blanca.

President George W. Bush speaks on stage in the East Room of the White House Tuesday, Jan. 13, 2009, during the Ceremony for the 2009 Recipients of the Presidential Medal of Freedom. With him on stage are the recipients, from left: Former Prime Minister Tony Blair of the United Kingdom, former Prime Minister John Howard of Australia, and President Alvaro Uribe of Colombia. White House photo by Chris GreenbergSiempre serán bienvenidos en este país. Y esperamos que vengan a visitarnos a Texas. Como probablemente hayan oído, estaremos cambiando de dirección… (risas)… en poco menos de siete días.

Estamos encantados de contar con muchos distinguidos invitados, personas que han trabajado con ustedes durante su periodo. A los miembros de sus familias que están presentes: realmente es un gusto que hayan venido.

También quiero darles las gracias al vicepresidente, miembros del gabinete y miembros del Congreso que nos acompañan. Ofrecemos una bienvenida especial a quienes son amigos personales de los homenajeados. Sé que están tan encantados como yo de que ustedes hayan venido.

En unos momentos, el edecán militar leerá las menciones de condecoración de quienes serán galardonados con la Medalla Presidencial de la Libertad. Esta medalla es el más alto galardón civil en Estados Unidos. Se otorga para reconocer logros ejemplares y transmitir el inestimable aprecio del pueblo y el Presidente de Estados Unidos.

En estos ocho años, he otorgado la Medalla de la Libertad a algunos de nuestros más eminentes ciudadanos. En ocasiones, también he tenido el honor de otorgarla a ciudadanos de otros países, que inspiraron particular admiración en Estados Unidos y aportaron liderazgo valiente a nuestro mundo. Entre los galardonados han estado Vaclav Havel, Ellen Johnson Sirleaf, Nelson Mandela, y el desaparecido Papa Juan Pablo II.

Esta tarde, me complace otorgar la Medalla de la Libertad a tres líderes extraordinarios. Rendimos homenaje a un Presidente actual y dos ex Primer Ministros, todos ellos verdaderos amigos de Estados Unidos, que afrontaron desafíos históricos con gran tenacidad y que son un ejemplo perdurable como estadistas dentro y fuera del país.

El primer día que conocí a Tony Blair, hace casi exactamente ocho años, se encontraba en su segundo periodo como Primer Ministro, y yo apenas comenzaba. Después de nuestra primera reunión, un reportero preguntó si habíamos encontrado algo en común, y yo respondí en broma que ambos usábamos la pasta dental Colgate. (Risas.)

Former Prime Minister Tony Blair of the United Kingdom, is joined by Australia's former Prime Minister John Howard and Colombian President Alvaro Uribe as they sit onstage in the East Room of the White House Tuesday, Jan. 13, 2009, during a ceremony honoring them as 2009 recipients of the Presidential Medal of Freedom. Established by Executive Order in 1963, the medal is America's highest civil award. White House photo by Chris GreenbergLo cierto es que sí sentí una fuerte conexión con Tony Blair. Como dije tras la primera reunión, supe que "cuando cualquiera de nosotros tuviera un problema, habría un amigo al otro extremo de la línea". Mi amigo estuvo allí, efectivamente, después de que Estados Unidos fue atacado el 11 de septiembre del 2001. Y no sólo se limitó a apoyo telefónico. Cuando me paré ante la Cámara de Representantes para pedirle al mundo civilizado que se uniera a la causa de la libertad, allí en la tribuna estaba el fiel amigo, el Primer Ministro Tony Blair.

Estaba allí en un momento de tribulaciones para reafirmar la relación especial entre Estados Unidos y el Reino Unido. Y estaba allí para mostrarle a Estados Unidos y a todos los países que comprendía lo que estaba en juego en la guerra contra el terrorismo. Y dijo, "así como el terrorista pretende dividir a la humanidad mediante el odio, nosotros debemos unificarla en torno a una idea. Y esa idea es la libertad". Con el liderazgo de Tony Blair, el poderío y autoridad moral de Gran Bretaña fueron aplicados a la guerra contra el terrorismo desde el primer día. Nuestros países trabajaron juntos y con orgullo para destruir refugios terroristas, liberar a millones y ayudar a democracias emergentes a satisfacer las aspiraciones de sus pueblos.

Toda la carrera de Tony Blair la define su devoción por los valores democráticos y la dignidad humana. Desde el fondo de su corazón, este hombre cree que todos deben ser libres: libres de la opresión, libres del hambre, libres de las enfermedades y libres del temor y la desesperanza. En la Cámara de los Comunes, como el Primer Ministro del Partido Laborista con el mayor periodo de servicio de la historia, luchó para mejorar las comunidades de su país y mejorar la vida de todos sus ciudadanos. Ayudó a convertir generaciones de violencia en Irlanda del Norte en años de paz. Llamó la atención y generó conciencia en el mundo sobre el sufrimiento en África, y continúa dedicado a la causa de la paz y la democracia como el enviado del Cuarteto al Oriente Medio.

President George W. Bush stands with former Prime Minister Tony Blair of the United Kingdom as they listen to a citation honoring Mr. Blair as recipient of the 2009 Presidential Medal of Freedom. The presentation, held Tuesday, Jan. 13, 2009, in the East Room of the White House, will be the last such presentation by President Bush during his administration. White House photo by Chris GreenbergTras dejar su cargo continúa en la luz pública, y Tony Blair sigue en el estrado mundial como un hombre sumamente inteligente y perspicaz, y por encima de todo, un hombre de fe e idealismo e integridad. El ex Primer Ministro del Reino Unido destacará en la historia. Y hoy, Estados Unidos de Norteamérica le rinde homenaje orgullosamente a su noble amigo, Tony Blair. (Aplausos.)

John Howard de Australia lleva muchos años en la política. Ha salido triunfante muchas veces y ha perdido otras pocas. Incluso hubo un momento, hace dos décadas, en que pensó que sus días de liderazgo político habían concluido. Un resurgimiento, dijo, sería como "Lázaro con un bypass triple". (Risas.) El hombre tiene una manera insólita de hablar. (Risas.)

Con su estilo franco y campechano, el retorno de John Howard se hizo realidad. Por votación electoral, ascendió al más alto cargo de su país, ganó cuatro elecciones consecutivas, y su mandato fue el más largo de todos los Primeros Ministros australianos, excepto uno. Y durante todo ese tiempo, John Howard mantuvo su estrecha relación con la gente de su país. Su periodo se caracterizó por gran confianza y prosperidad nacional, y creciente influencia mundial. Se hizo merecedor del respeto de líderes alrededor del mundo por su compromiso con el libre mercado, la cooperación y la resolución pacífica de discrepancias. Es un custodio fiel de las alianzas de Australia y un amigo firme en momentos de necesidad.

En un evento aquí en Washington, reflexionó sobre las muchas pruebas que nuestros dos países enfrentaron juntos en el siglo XX. Habló apasionadamente sobre los valores que compartimos, como también de nuestra obligación de defenderlos, y "si es necesario, luchar por ellos y estar listos a repeler a quienes procuran privarnos de [nuestras] libertades".

Resulta que John Howard pronunció esas palabras el lunes, 10 de septiembre de 2001, y con sus acciones posteriores, probó ser fiel a sus convicciones. Siempre ha sido valiente en la defensa de la libertad. En estos siete años, nuestros dos países han perdido civiles inocentes y sufrido bajas en los campos de batalla. Pero este hombre, que vio el Pentágono arder el 11 de septiembre y que confrontó… consoló a los sobrevivientes de Bali, nunca vaciló en su compromiso de acabar con este gran peligro para la civilización. Nunca vaciló en su apoyo a la libertad y las instituciones libres y el imperio de la ley como alternativas verdaderas y promisorias a las ideologías de la violencia y la represión. Es un hombre de honradez y claridad moral. Puede tomar una decisión, puede defenderla y se mantiene firme. Es por eso que lo llamé el Hombre de Acero.

President George W. Bush applauds former Prime Minister Tony Blair after presenting him Tuesday, Jan. 13, 2009, with the 2009 Presidential Medal of Freedom during ceremonies in the East Room of the White House. White House photo by Chris GreenbergEn el temple de John Winston Howard vemos ese excelente espíritu australiano de "apoyar a tus amigos". Nuestros dos países, aunque en lados opuestos del globo, han disfrutado de un compañerismo fácil y natural. Y como el vigésimoquinto Primer Ministro del Commonwealth de Australia, representa todo lo que los estadounidenses más aprecian y admiran de su maravilloso país.

Entonces, señor Primer Ministro, nuestro amigo, bienvenido a la Casa Blanca y felicitaciones. (Aplausos.)

Los líderes nacionales a veces asumen el cargo sin pleno conocimiento de las pruebas que deberán enfrentar. Pero cuando Álvaro Uribe pasó a ser el Presidente de Colombia, los desafíos estaban a la vista. Sabía exactamente en lo que se metía.

 Durante más de una generación, la gente buena y decente en todo ese país había vivido a la merced de los brutales carteles de drogas y grupos armados ilegales. La propagación de la violencia terrorista y matanzas y secuestros había debilitado el sistema político y había llevado a muchos colombianos a desesperar por el futuro de su país. A comienzos de esta década, la República de Colombia estaba a punto de ser, en el mejor de los casos, un estado fallido, o en el peor de los casos, un narco-estado. Bajo esas condiciones, se necesitaba más que ambición e ideales para postularse a un cargo político; se necesitaba inmensa valentía personal y fortaleza de carácter.

Como candidato presidencial en el 2002, Álvaro Uribe le prometió a su pueblo mayor seguridad, una democracia más saludable y una mejor oportunidad de vivir con prosperidad. Fue elegido con un tema que expresó perfectamente lo que el pueblo colombiano deseaba en su presidente: "Mano firme y corazón grande".

Former Prime Minister John Howard of Australia, smiles as President George W. Bush presents him with the 2009 Presidential Medal of Freedom Tuesday, Jan. 13, 2009, during ceremonies in the East Room of the White House. Established in 1963, the Medal may be presented to "any person who has made an especially meritorious contribution to the security or national interests of the United States, or world peace or cultural or other significant public or private endeavors." White House photo by Chris GreenbergEl liderazgo del Presidente Uribe ha sido decidido y firme. Hoy en día, en Colombia, los homicidios han disminuido 40 por ciento, los secuestros han disminuido más de 80 por ciento, los atentados terroristas han disminuido más de 75 por ciento. Las fuerzas de la violencia están a la defensiva, y el pueblo está recuperando su país.

Los conciudadanos del Presidente Uribe lo conocen como alguien que habla directamente y cumple sus promesas. Gracias al interés que ha tenido en la vida política durante toda su vida, tiene un entendimiento fenomenal de los detalles de gobernar. Al mismo tiempo, ha forjado lazos sólidos con su pueblo. Se reunieron con su Presidente en recintos municipales en todo el país. Lo han visto producir resultados. Les agrada y confían en él, y lo han hecho el primer líder colombiano en tiempos modernos que gana la reelección.

Recientemente, se me ha pedido que reflexione sobre los sucesos más memorables de mi presidencia. Entre ellos se encuentra una llamada telefónica que recibí hace varios meses del Presidente Uribe. Llamó para decir que un grupo de rehenes que incluía a tres estadounidenses y que había estado cautivo durante cinco años había sido rescatado, y que estaban vivos y sanos y salvos. Fue un momento lleno de gozo, señor Presidente. Y fue gracias a su liderazgo. 

Para el Presidente Uribe, las muchas exigencias del cargo continúan. Hoy, Estados Unidos rinde homenaje a todos los colombianos al condecorar al hombre que han escogido como líder. Al rehusarse a permitir que el país que ama sea destruido por un enemigo interno, al probar que es posible oponerse y derrotar al terrorismo, el Presidente Uribe ha despertado la esperanza entre sus conciudadanos y, al mundo que observa, le ha mostrado un modelo de liderazgo. Colombia sigue enfrentando desafíos como nación. Pero el futuro siempre será prometedor en un país que produce hombres como el Presidente Álvaro Uribe.

President George W. Bush applauds former Prime Minister John Howard after presenting the Australian leader with the 2009 Presidential Medal of Freedom during ceremonies Tuesday, Jan.13, 2009, in the East Room of the White House. White House photo by Chris GreenbergFelicitaciones, mi amigo. (Aplausos.)

Cada uno de estos caballeros a los que rendimos homenaje hoy tiene su propio estilo y personalidad, y cada uno ha acumulado distinciones y logros que les pertenecen sólo a ellos. Sin embargo, los tres han mostrado que se ciñen firmemente a los principios de la libertad y valores democráticos, y que tienen la voluntad para enfrentar los problemas directamente en vez de pasárselos a otros. Son el tipo de persona que te mira a los ojos y te dice la verdad y cumple con su palabra. Durante sus largos periodos de servicio, probaron que son líderes de gran integridad y fortaleza. Son amigos solícitos de Estados Unidos de Norteamérica. La oportunidad de conocerlos y trabajar con ellos ha sido una de las más grandes satisfacciones de mi periodo como Presidente. Los respeto y los admiro.

Y ahora le pido al edecán militar que lea las menciones de condecoración de los galardonados, y será un honor para mí otorgarle la Medalla Presidencial de la Libertad a Tony Blair, John Howard, Álvaro Uribe.

EDECÁN MILITAR: Tony Blair. Tony Blair ha sido una fuerza enérgica a favor de la libertad y el mayor entendimiento entre las naciones. Como Primer Ministro del Reino Unido, su participación fue decisiva para ayudar a millones de personas a lograr la libertad en Afganistán, Iraq, Kosovo y Sierra Leona; forjar una nueva era de paz en Irlanda del Norte, prestar ayuda humanitaria alrededor del mundo, especialmente en África, y reforzar la relación entre nuestros dos países. Durante toda su carrera y en su función como representante del Cuarteto ante el Oriente Medio, ha trabajado para proporcionarles a las personas oportunidades para una vida mejor.
  
Estados Unidos le rinde homenaje a Tony Blair por dedicar su vida a forjar un mundo más justo y pacífico. (Aplausos.)

(Se otorgó la medalla.) (Aplausos.)

EDECÁN MILITAR: John Winston Howard. Durante una carrera de servicio público que abarca varias décadas, John Howard ha sido un inquebrantable defensor de la democracia y la libertad. Como Primer Ministro de Australia, ayudó a brindarle prosperidad sin paralelo a los pobladores de su país por medio de la firme observancia de los principios del libre mercado.


President George W. Bush stands with Colombian President Alvaro Uribe Tuesday, Jan. 13, 2009, during ceremonies honoring the 2009 Presidential Medal of Freedom Recipients in the East Room of the White House.  White House photo by Chris GreenbergLas relaciones entre los dos países nunca fueron más estrechas que bajo su liderazgo y después de los ataques del 11 de septiembre del 2001. Trabajó resueltamente para combatir el flagelo del terrorismo, llevar libertad a millones de personas y promover la democracia, los derechos humanos y el estado de derecho.

Estados Unidos le rinde homenaje a John Winston Howard por sus esfuerzos de toda una vida para propagar la esperanza y libertad en todo el mundo. (Aplausos.)

(Se otorgó la medalla.) (Aplausos.)  

EDECÁN MILITAR: Álvaro Uribe Vélez. Como Presidente de Colombia, Álvaro Uribe defendió el imperio de la ley en un país que padeció décadas de violencia a manos de grupos armados ilegales. Ha demostrado un firme compromiso con la prosperidad del pueblo colombiano, y su política audaz ha propagado los valores democráticos y sentado las bases para una paz perdurable en toda Colombia.

Ha sido un valiente aliado de Estados Unidos. Y bajo su liderazgo, Colombia se ha convertido en un modelo para los países que buscan la reconciliación y el establecimiento de una sociedad basada en el respeto por la dignidad humana.

Estados Unidos le rinde homenaje a Álvaro Uribe Vélez por su dedicación a la libertad, la democracia y el estado de derecho. (Aplausos.)

(Se otorgó la medalla.) (Aplausos.)

EL PRESIDENTE: En honor a estos distinguidos caballeros, Laura y yo los invitamos a pasar a una recepción en el Comedor de Estado. Por favor, disfrútenla y gracias por acompañarnos aquí en la Casa Blanca. (Aplausos.)

                   END        1:26 P.M. EST

 


President George W. Bush congratulates President Alvaro Uribe of Colombia after presenting him with the 2009 Presidential Medal of Freedom Tuesday, Jan. 13, 2009, during ceremonies in the East Room of the White House. White House photo by Chris Greenberg
Colombian President Alvaro Uribe is congratulated by former Prime Minister John Howard of Australia, and former Prime Minister Tony Blair, left, of the United Kingdom after he was honored by President George W. Bush with the 2009 Presidential Medal of Freedom during ceremonies honoring all three leaders with America's highest civil award. White House photo by Joyce N. Boghosian


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